Privilegios e invisibilización en el movimiento LGTBI+

Tuesday, 7 April, 2020

*Este texto recoge la información debatida en la Minga “Privilegios e Invisibilización en el movimiento LGTBI+”.

Organizada por Nanouki e impartida por Pablo Arconada Ledesma de forma online el 6/04/2020.

La comunidad LGTBI+ ha conseguido enormes avances en sus derechos como ciudadanxs en las últimas décadas, muy especialmente en España y en buena parte de Europa Occidental. Otras regiones donde estos grupos han logrado mejorar su situación son Latinoamérica y América del Norte, así como otras espacios aislados como Sudáfrica y Oceanía. Sin embargo nos olvidamos que la comunidad LGTBI+ no es un bloque monolítico y aunque la situación haya mejorado sensiblemente, este progreso es desigual en diferentes partes de nuestro planeta. También hay diferencias entre las diferentes “siglas” que conforman la comunidad, siendo siempre mejor la posición de la comunidad gay que el contexto en el que viven las personas trans o intersexuales, por ejemplo. Igualmente, hay otros parámetros que también amplían las diferencias: género, origen socio-económico, edad, “raza”, religión… Todo ello también afecta a la vida de cada una de las personas de esta comunidad. Además, el papel del movimiento ha estado, durante años, abanderado sobre todo por hombres, cuya imagen ha copado los titulares. Sin embargo, la historia nos demuestra que esto no siempre ha sido así.

 

Celebraciones del Orgullo gay en Madrid Imagen extraída de: https://www.laguiago.com/espana/ultimo-fin-de-semana-del-orgullo-lgbt-en-madrid

 Celebraciones del Orgullo gay en Madrid
Imagen extraída de:
https://www.laguiago.com/espana/ultimo-fin-de-semana-del-orgullo-lgbt-en-madrid

 

Stonewall Inn, el despertar de una conciencia social

Se considera que la comunidad se organizó oficialmente como un movimiento social en 1969, durante los disturbios de Stonewall Inn, en Nueva York. Aunque ha habido acontecimientos anteriores como la revuelta Cooper’s Donut (1959) que se desarrolló en la misma ciudad y las protestas de la Cafetería Comptons que tuvo lugar en San Francisco (1966), Stonewall ha pasado a la Historia por convertirse en el gran referente del despertar de las luchas LGTBI+. Este movimiento surgió para poner fin a las duras leyes represivas existentes en Estados Unidos y a las continuas redadas, detenciones, palizas y violaciones de todo tipo que la policía ejecutaba contra toda persona considerada “no normal”.

Stonewall Inn Imagen extraída de: https://es.wikipedia.org/wiki/Disturbios_de_Stonewall

Stonewall Inn
Imagen extraída de:
https://es.wikipedia.org/wiki/Disturbios_de_Stonewall

La noche del 28 de junio la policía entró en el bar Stonewall Inn frecuentado por todo tipo de personas gay, trans, prostitutas, chaperos etc y, como de costumbre, procedió a realizar una redada. Sin embargo aquella noche algo fue diferente. La rabia había explotado y nada volvería ser lo mismo. Las noticias corrieron como la pólvora en sólo unos minutos y miles de personas se arremolinaron a las puertas del bar, lanzando todo tipo de objetos como monedas, excrementos de perro, zapatos y basura contra la policía. La noche de disturbios fue larga y de fondo se oía “We shall overcome”, convertida en el himno de la revolución.
            Los acontecimiento de Stonewall Inn se extendieron rápidamente por diferentes ciudades de Norteamérica y Europa, que cada año conmemoraban aquellos disturbios en lo que hoy conocemos como “el Orgullo”. No parece una coincidencia que las personas que iniciaron esta lucha estuvieran, hasta hace poco, plenamente invisibilizadas. Aunque cada vez es más conocido, todavía hay muchas personas que no saben que quien inició todo este movimiento eran dos mujeres trans, racializadas, pobres y prostitutas. Hablamos de Marsha P. Johnson y de Sylvia Rivera.

Sylvia Rivera y Marsha P. Johnson
Imagen extraída de: 
https://aldianews.com/es/articles/culture/sylvia-rivera-activista-trans-latinx-de-stonewall-tendra-un-monumento-en-nueva-york

Invisibilización y mass media

 

No parece ser mera coincidencia que las dos personas que lideraron las protestas hayan caído en el olvido. Tanto Sylvia como Marsha tuvieron que hacer frente a los ataques y al rechazo de parte de la comunidad LGTBI. Un claro ejemplo fue el episodio durante el Día de la Liberación de 1973 donde Sylvia Rivera cogió el micrófono y algunos grupos empezaron a abuchearla. Pero ¿quiénes eran estas personas? ¿por qué la despreciaban?. La mayor parte eran hombres cisgénero gay que consideraban que las personas trans dificultaban la “normalización de la comunidad gay” y la “aceptación” por parte de la sociedad. También algunos grupos de mujeres lesbianas se unieron a  los abucheos ya que creían que las personas trans estaban ridiculizando el “ser mujer”.

Un acontecimiento parecido tuvo lugar en España. El movimiento en nuestro país se inició unos años más tarde, en 1977. En ese año se convocó a la comunidad LGTBI+ a una manifestación en las Ramblas en Barcelona. Las personas que, cansadas de esperar a que se iniciara la marcha, tomaron la iniciativa fue un grupo de travestis que bajaron las ramblas protestando por su situación y tuvieron que enfrentarse a la represión policial. Hoy en día también se ha tratado de borrar la importancia que tuvo este colectivo en el inicio de la lucha de toda la comunidad. Tanto el episodio de Estados Unidos como el de España han sido alterados y en este borrón han tenido un papel esencial los medios de masas. Un ejemplo es un reportaje de La Sexta en el que se señalaba que el papel de las travestis en las Ramblas no había sido para tanto, y que “la imagen real de la protesta” no era esa, quitándole importancia a su empuje. Igualmente, una película de 2015 llamada “Stonewall” relata la historia de los disturbios de 1969 pero, oh sorpresa, la persona que protagoniza el largometraje es… un hombre, joven, blanco y que entra en los parámetros de “belleza” occidental. Debe ser que la imagen de Marsha y Sylvia no debe vender igual de bien.

 

Protestas de las Ramblas (1977)
Imagen extraída de:
https://elpais.com/ccaa/2017/06/28/catalunya/1498647028_431114.html

La “herida” del privilegio

 

Lo más triste es que no sólo los mass media se han encargado de invisibilizar a parte del colectivo, lo cierto es que la imagen dentro de la comunidad sigue estando copada por el hombre gay, europeo, con dinero en el bolsillo y joven. Es evidente que este es el perfil que sí debe vender. Y no es solo la imagen, si lo pensamos la OMS despatologizó la homosexualidad en 1990, sin embargo la transexulidad no ha sido eliminada como enfermedad hasta 2018, casi dos décadas después. ¿A qué se debe? Bueno, este es un tema que da para un largo debate. Pero quizás tenga que ver con el sistema en el que vivimos y hemos crecido y al que le resulta mucho más fácil “aceptar” y “normalizar” a una parte del colectivo por encima del resto. Es evidente que para un sistema hetero-cis-patriarcal, le resulta más fácil “normalizar” a un grupo de hombres cisgénero y blancos que a grupos de mujeres lesbianas, trans, intersexuales, racializadxs, pobres etc… Además tampoco es una coincidencia que se acepte a una parte del colectivo, con privilegios, por encima del resto. Esto también ha fragmentado la lucha de todo el colectivo, dividiendo lo que, en un principio, era un objetivo común: la consecución de derechos y libertades, así como el fin de toda discriminación por razón de identidad de género y orientación secual para todo un grupo de personas que han sido históricamente persguidxs por las fuerzas del estado y repudiadas por gran parte de la misma sociedad de la que formaban parte.

            Es aquí donde debemos pararnos a pensar en el impacto negativo que tiene la invisibilización en parte del colectivo. Ser no visible significa, por un lado, que la sociedad no te conoce, y por lo tanto nunca te va aceptar ni a reconocer. Por otro lado, crea un enorme vacío de referentes para otras personas trans, gay, bisexual, lesbiana, pansexual… con lo que eso impide el proceso de identificación y de construcción de la identidad, así como de generar una cohesión en el colectivo. Pero hay más, el privilegio no es sólo visibilidad e identidad, también es poder. Pero ¿Quién tiene el privilegio? ¿Por qué lo tiene? ¿Cómo lo ha utilizado? ¿En beneficio propio? ¿Es positivo que haya personas con privilegio dentro del colectivo LGTBI+?

            Es evidente que las personas que ostentan una serie de privilegios en el colectivo LGTBI+ suele ser un perfil muy marcado: hombre cisgénero, gay, blanco, clase media, alto nivel de estudios... Como he señalado más arriba esto ha provocado una fragmentación dentro del colectivo y también en el movimiento social. Cuando un grupo accede a una situación de beneficio se olvida pronto del resto. Y este factor el sistema en el que vivimos lo ha sabido explotar al máximo. Ya lo hizo en los procesos de colonización, también en las luchas sociales y, de alguna forma, también está fragmentando el movimiento el LGTBI+ bajo el auspicio de dos reglas: la lógica del poder y la del “divide y vencerás”.

Algunos de los debates que generó esta Minga

 

  • ¿Por qué se origina la invisibilización? ¿Cómo se accede al privilegio?
  • ¿Es justo el uso de las siglas LGTBI+?
  • ¿Cual es el papel de los mass media en los procesos de invisibilización y creación de privilegios?
  • ¿Cuál es la relación del capitalismo con el movimiento LGTBI+? Pink Washing / Capitalismo Rosa / Fiesta del Orgullo. No os perdáis la labor que hace la plataforma Orgullo Crítico https://orgullocritico.wordpress.com/
  • Aceptación de una parte del colectivo de los discursos de la extrema derecha, sobre todo en lo relacionado a la inmigración. La teórica queer Jasbir Puar abordó este tema en su libro “Ensamblajes Terroristas. El homonacionalismo en tiempos queer”. Os dejo este texto de Pikara Magazine que lo explica bastante bien: “Por las grietas homófobas del homonacionalismo”. https://www.pikaramagazine.com/2017/04/homonacionalismo/
  • El origen del término “pluma” y la situación actual sobre la plumofobia dentro del colectivo LGTBI. ¿Tiene que ver algo la plumofobia con la misoginia?

 

  • Sobre “privilegios” en las lesbianas. Romantización y sexualización de las relaciones entre mujeres. La invisibilización lésbica.

 

  • Realidades LGTBI+ como materia de estudio obligatorio en la educación de nuestro país.

 

  • Participación de las personas heterosexuales y cisgénero en el movimiento LGTBI+. Alianzas y el papel de cada unx dentro del movimiento.

 

  • En relación al fin de las “etiquetas” y al “encajonamiento” de la identidad en el colectivo LGTBI.

 

  • Gestación subrogada y el “derecho” de los colectivos homosexuales. Qué implica para los derechos de las mujeres.